Ya empezamos con las desigualdades entre españoles. Acaban de ganar las elecciones y a buen seguro, la señora Sáenz de Santamaría es cuando menos, una señora ministrable.
Este asunto viene a cuento por lo de la maternidad de la susodicha diputada del P.P., si está de baja por maternidad, en principio n
o debe trabajar, no puede trabajar, al menos eso es lo que dice la ley para todos, y digo y subrayo la palabra todos.
Entonces a tenor de esto, dónde está la Inspección de Trabajo y Seguridad Social que no impide de oficio esta práctica desviada de una diputada a la que casi se la postula de vicepresidenta del gobierno español. Está más que claro que si esta situación se diera en casa de una española de a pie (dícese del montón) la administración le hubiera caído con todo el peso de la norma, ¿ o no es así?.
Por favor, señores elegidos del P.P., déjense de demagogia y empiecen a hacer las cosas bien. La señora diputada no puede trabajar y sin embargo ahí está, trabajando a diestro y siniestro como encargada de los traspasos de poderes del gobierno saliente al gobierno electo del P.P.